Rollermadrid ha aportado a mi vida aparte e hacer un deporte muy divertido y saludable una inyección de buen rollo, de ganas de pasarlo bien, de conocer gente fantástica tanto profesores como compañeros. Terminar el día después de un buen rato patinando y volver a casa con una sonrisa en la cara dan ganas de continuar aprendiendo y es una sensación fantástica.
Gracias Rollermadrid