Tornillos y straps
En una anterior entrada hablamos acerca de las ruedas de nuestros patines y cómo darles un mantenimiento apropiado
. Si no lo has leído todavía, te recomendamos encarecidamente que lo hagas antes de continuar leyendo esta nueva entrega de mantenimiento de patines. Haciendo un resumen, explicamos diferentes atributos de las ruedas y qué impacto tienen al patinar; también vimos por dónde y cómo se suelen desgastar las ruedas y distintas maneras de rotarlas para que el desgaste sea lo más uniforme posible.
Ahora bien, hay más partes a las que deberíamos prestar atención y mantenerlas adecuadamente para poder patinar de forma segura, son las siguientes:
- Tornillos
- Straps
- Rodamientos
En esta entrega, hablaremos de los tornillos y los straps, y en una futura entrega hablaremos de rodamientos.
Fig 1. Tornillos en un patín.
Los patines tienen tornillos en diversas partes para unir las partes móviles y fijas de la que están compuestos (ver fig 1.):
- Ruedas.
- Anclaje de guía al patín (no se aprecian en la anterior foto foto).
- Caña.
- Strap de la caña.
- Strap del empeine.
- Partes adicionales como protectores laterales, etc..
De todos los mencionados, los tornillos de las ruedas son los más importantes: si perdemos un tornillo, perdemos una rueda, y lógicamente, no queremos que eso ocurra: queremos patinar de una manera segura.
Habitualmente, estos tornillos vienen con un fijatornillos que impide que se aflojen fácilmente. Es una especie de “pintura” de color azul o rojo (el segundo pega mucho más que el primero) que podéis comprar en algunas ferreterías.
Poco a poco, el fijatornillos va perdiendo efectividad, pero no hace falta preocuparse demasiado por ello: es poco habitual que haga falta renovar la capa de fijatornillos (yo solo lo he hecho una vez). Notaréis que necesitáis cambiarlo si tenéis que estar constantemente ajustando los tornillos de las ruedas. Si se da tal caso, hay que desmontar todas las ruedas y los tornillos. A continuación, aplicamos una gotita muy pequeña en la rosca del tornillo y lo enroscamos de nuevo en la guía, para que parte de la pintura se impregne también en la guía y fije mejor. Hacemos esta primera operación sin ruedas, para evitar mancharlas o dañar los rodamientos por error. Si manchamos la guía, procuraremos limpiarla con un poco de papel. Esperamos unos 5 minutos, y volvemos a desatornillar y a atornillar, esta vez, incluyendo las ruedas, en unos 25 minutos estará ya totalmente seco y listo para rodar.
Al margen del fijatornillos, en general los tornillos tienen vida propia: algunas veces se aprietan, otras veces se aflojan. Antes de empezar una ruta conviene revisar que los tornillos están bien apretados (sin pasarse, no queremos pasarnos de rosca); y tras una ruta muy larga, es buena idea aflojarlos un poco para que no se queden como una piedra. Podéis ver esto como si fuera el calentamiento y los estiramientos que hacemos con nuestros músculos, solo que aplicado a los tornillos.
Otros tornillos prácticamente igual de importantes que los de las ruedas son los que unen la guía al patín.
Lo más común es que tornillos de las guías sean dos: uno delante y otro detrás (ver fig. 2 y 3). Algunos modelos montan hasta tres (ver fig. 4). Por otro lado, los modelos más básicos de patines de fitness ni siquiera disponen de ellos ya que la guía es prácticamente una pieza única que va pegada a la bota.
Al igual que los de las ruedas, suelen tener fijatornillos para asegurar la sujección. Es importante asegurar y apretar bastante fuerte estos tornillos, ya que una guía que se mueve es muy poco segura. Para poder acceder a ellos tendréis que desatornillar una o dos ruedas (en el caso de la foto, las ruedas están tan desgastadas que se pueden acceder a ellos casi sin desatornillar).
No hay mucho que contar aquí, excepto antes de desatornillarlos os fijéis en que posición está puesta la guía, ya que la mayoría se pueden poner en distintas posiciones para ayudarnos a corregir nuestra pisada. Al volver a atornillarlos nos interesa dejarlo todo en la misma posición que estaba antes.
Fig. 2 y 3 – Tornillos delantero y trasero
Fig 4. Guía Trinity de Powerslide, usa tres anclajes.
A continuación van los tornillos de las cañas, la caña es la parte alta de la bota y es la encargada de sujetarnos el pie como si tuviésemos una bota de esquí puesta, especialmente en patines de freeskate. Se puede patinar sin caña, por ejemplo, los patinadores de velocidad no usan caña, e incluso podemos desmontarla para patinar sin ella y ganar fuerza en los tobillos. En algunos patines esta caña se puede mover, y en otros no. En algunos patines la caña se une con un tornillo (ver fig. 5) y en otros con un remache.
Si tenemos un remache no hay que preocuparse de nada, pero si hay un tornillo, de vez en cuando conviene revisarlo y apretarlo. Lo normal es que se precise una llave allen o torx para ello.
Finalmente estarían los tornillos de los cierres (straps). Estos se suelen apretar con un simple destornillador de estrella, tanto el del strap del empeine (ver fig. 5) como los de la caña (ver fig. 6 y 7), y suele haber uno a cada lado del patín (strap y enganche del strap).
Fig 5. Tornillo de la caña (izq). También se aprecia el tornillo del strap del empeine (centro) así como un tornillo adicional que sujeta el cierre micrométrico (dch).
Fig 6. Tornillo que sujeta el enganche del cierre.
Fig 7. Tornillos que sujetan los enganches del strap.
Finalmente estarían los tornillos de los cierres (straps). Estos se suelen apretar con un simple destornillador de estrella, tanto el del strap del empeine (ver fig. 5) como los de la caña (ver fig. 6 y 7), y suele haber uno a cada lado del patín (strap y enganche del strap).
Como en todo, dependiendo del modelo del patín los tornillos pueden estar dispuestos de diferentes maneras y usar diferentes materiales por lo que necesitaremos apretar más o menos a menudo unos tornillos que otros. Por ejemplo, en mis patines Twister jamás he tenido que apretar los cierres de la caña, pero en mis Igor, me he visto obligado a ajustarlos cada pocas horas de rodaje.
Para terminar, resumimos los puntos más importantes: por seguridad, conviene revisar los tornillos antes y después de rodar (especialmente rutas largas, carreras, maratones…). Si no disponemos de todo el tiempo del mundo para revisar, entonces tiene más prioridad revisar los tornillos que están directamente relacionados con el rodaje (ruedas y guía), y luego ya los tornillos que sirven para dar sujección al pie (straps).
En caso de duda sobre como dar mantenimiento a alguna pieza, no dudeis en contactar con alguno de los profesores de Roller Madrid, ¡os ayudaremos encantados!
Go Rollers!